Don Augusto decía sobre su hijo Héctor de 13 años, afanoso lector, “¡y vaya a ver en qué ha gastado ese dinero! ¡Pues en libros!… ¡Con libros quiere llegar a ser millonario ese mal muchacho! ¡Con libros piensa hacerse fortuna! ¿Has oído alguna vez algo más absurdo?”. El anterior es un fragmento del cuento “El deterioro”, con datos de sus propias vivencias, del notable escritor chino-peruano-estadounidense Siu Kam Wen.
La lógica del personaje de don Augusto resume el pensamiento imperante mundial donde los libros y su lectura no encajan en “la cultura del ahora”, que rinde culto a la satisfacción de ver ganancias y resultados económicos inmediatos, según explica la socióloga Laura Potter. Sin embargo, diversos políticos y empresarios no entienden que leer, sobre todo ficción, promueve una mayor agudeza social, pensamiento crítico y mejor capacidad para comprender las motivaciones y emociones de los demás, según confirmó la profesora Christine Seifert en la Harvard Business Review, de acuerdo con los últimos estudios de la neurociencia.
El 23 de abril se celebra el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor con el fin de fomentar la cultura literaria porque “los libros tienen esa capacidad única de entretenimiento, de instruirnos… de ofrecer un tiempo para sumergirse más profundamente en sí mismo” declara Audrey Azoulay, Directora General de la Unesco. También se conmemora el Día del Idioma español o castellano debido a que en torno a este día fallecieron Miguel de Cervantes, William Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega.
Considerado el símbolo del mestizaje americano, el Inca Garcilaso de la Vega escribe en un castellano pulcro y a la vez, tiene un “gran amor a la tierra que lo vio nacer y un reverencial sentido de patria”, aseguraba el crítico literario Alberto Escobar, quien destacaba en Garcilaso su dominio del quechua pues “atrajo la mirada del pasado remoto del país y lo proyectó al futuro y meditó en el destino del español del Perú”.
Actualmente el español es el segundo idioma más usado en redes sociales y el cuarto más hablado en el mundo. Como menciona la comunicadora colombiana Gabriela de la Parra sobre nuestro idioma “también es un asunto político, pues agrupa a los pueblos, a la sociedad. Es algo que está vivo, es importante saber leer y escribir porque vivimos en una sociedad atravesada por los códigos de escritura y lectura. Son elementos básicos para funcionar en sociedades como las nuestras”.
Para celebrar este día se puede promover la lectura en las personas que nos rodean, regalar un libro, incentivar una buena conversación, contar historias a los niños, animar la lectura de cuentos en jóvenes y adolescentes, y leer todo lo que se pueda. El filólogo Salvador Gutiérrez, miembro de la Real Academia Española de la lengua ratifica que “un idioma es un organismo vivo, que está al servicio de los hablantes y no podemos ser puristas. No podemos olvidar que la lengua es pura democracia. Cada vez que un hablante la usa está ejerciendo su voto”.
Cuando desde Europa quisieron eliminar la letra Ñ, Gabriel García Márquez reclamó que se quiera aplicar “razones de comodidad comercial para semejante abuso y tamaña arrogancia. Deberían saber que la ñ no es una antigualla arqueológica, sino todo lo contrario: un salto cultural de una lengua romance que dejó atrás a las otras al expresar con una sola letra un sonido que en otras lenguas sigue expresándose con dos” (nh en portugués, ny en catalán y gn en francés e italiano).
Jorge Luis Borges decía que “de todos los instrumentos del hombre, el más asombroso es, sin duda, el libro… El libro es una extensión de la memoria y la imaginación”. Y es importante porque en los libros está, todavía, la esperanza de un mundo mejor, según aseveró el escritor Nuccio Ordine en su ensayo La utilidad de lo inútil, “la literatura y los saberes humanísticos, la cultura y la enseñanza constituyen el líquido amniótico ideal en el que las ideas de democracia, libertad, justicia, laicidad, igualdad, derecho a la crítica, tolerancia, solidaridad, bien común, pueden experimentar un vigoroso desarrollo”. Así sea.