“No actuar nos hará cómplices de una debacle que podría ser irreversible”
Por: Segundo Vicente Calle.
La falta de acción no solo perjudicaría a la región, es hora de tomar decisiones firmes para preservar la Amazonía, garantizar el acceso a recursos esenciales y fortalecer la economía local.
La deforestación descontrolada, el deterioro ambiental y la crisis hídrica amenazan con llevar a la región San Martín a un punto de no retorno. Según estudios recientes, hasta el 2021 se había deforestado entre el 18 y 20% de la Amazonía peruana, y si esta tendencia continúa hasta el 25% en 2030, se desencadenarían eventos catastróficos de impacto irreversible. En la región San Martín, la situación es alarmante: según cifras del Colegio de Ingenieros, la deforestación ha alcanzado el 29%, y al llegar al 30%, entraría en colapso ambiental.
Un Ecosistema en Peligro
San Martín, con sus 10 provincias, 78 distritos y una fuerte presencia de pueblos originarios Awajún, Kichwas y Shawis, se encuentra en la primera línea de la crisis ecológica. La deforestación descontrolada, la tala ilegal y la expansión de cultivos para el narcotráfico han destruido gran parte de la cobertura boscosa, poniendo en riesgo la biodiversidad, los recursos hídricos y la seguridad alimentaria de la región.
Crisis Hídrica y Salud
La crisis hídrica es una de las consecuencias más graves de esta situación. La reducción de los caudales de ríos y quebradas, sumada a la contaminación por desechos y aguas residuales, ha generado un estrés hídrico sin precedentes. Esto afecta directamente a la población, incrementando los índices de enfermedades como el dengue, la anemia infantil y rebrotes de COVID-19. A pesar de esta realidad, la región no ha sido declarada en emergencia hídrica.
Producción Agrícola en Peligro
El sector agrícola también enfrenta un declive preocupante. Aunque algunos cafetaleros y cacaoteros logran exportar a precios altos, la mayoría de los agricultores carecen de asistencia técnica y acceso a créditos, lo que limita su competitividad. La falta de inversión en tecnologías de riego y almacenamiento de agua también afecta la producción.
Infraestructura en Escombros
La conectividad y el acceso a servicios esenciales también están en crisis. Existen proyectos estancados en transporte, energía eléctrica y saneamiento. La vía Fernando Belaúnde Terry está en peligro de deterioro irreversible, mientras que los aeródromos de Tocache, Rioja y Juanjuí siguen en el olvido.
Sub estaciones de Moyobamba y Picota, cambio de redes
El sistema eléctrico también enfrenta deficiencias críticas. La infraestructura es obsoleta, que limita el crecimiento industrial y productivo. La ampliación del servicio de electrificación rural y la modernización de subestaciones en Moyobamba y Picota son medidas urgentes, al parecer las autoridades no le dan atención, por su miopía.
Llamado a la Acción: A pesar de la crisis del Estado en todos sus niveles, no desmayar, no hacerlo sería cómodo. Dialogo por el desarrollo.
Ante esta crisis, la Red de Municipalidades de la Región San Martín (REMURSAM) ha solicitado la instalación de Mesas de Desarrollo Territorial con la presencia del premier y los ministros de diversos sectores clave como Ambiente, Agricultura, Transportes, Salud, Educación y Producción.
El objetivo es elaborar una cartera prioritaria de inversiones y establecer una hoja de ruta para el cierre de brechas en salud, educación, agua y saneamiento, seguridad interna, conservación de bosques, conectividad y energía eléctrica.
La falta de acción no solo perjudicaría a la región, sino a todo el país.
Es hora de tomar decisiones firmes y urgentes para preservar la Amazonía, garantizar el acceso a recursos esenciales y fortalecer la economía local. No actuar nos hará cómplices de una debacle que podría ser irreversible
Atenuantes
SERFOR anunció el día 03 de mayo el inicio del Programa Bosques Productivos Sostenibles, con un fondo de S/742 mil para productores de plantaciones forestales, un modelo de cofinanciamiento innovador en nuestro país, que permitirá a comunidades nativas, campesinas y pequeños productores acceder a recursos no reembolsables.
Los que recibirán este incentivo lo reciben o recibirán los que acrediten la actividad forestal en una propiedad mínima de 100 hectáreas.
Lo que hay que demandar es que se flexibilicen los requisitos o se cree un programa con incentivos con tasa de 1 a 3 % para que los pequeños productores forestales de la agricultura familiar que en su mayoría son de subsistencia, que tiene 3, 5, 7, 10 o más hectáreas puedan acceder a este programa muy importante para la reforestación y recuperación de bosques para luchar contra el cambio climático.
Exigir la creación de un Programa para implentar como política de Estado para acceder y masificar la tecnología de riego tecnificado, mediante créditos o incentivos para que los agricultores agricultoras de la agricultura familiar accedan a estas tecnologías que en nuestra región es muy importante implantarse.