Conoce 4 emprendimientos que impulsan el crecimiento de productores y comunidades indígenas.
Hasta el domingo 16 de noviembre, la Feria APEC Ciudadano 2024 se desarrolla en el Puericultorio Pérez Araníbar, Magdalena del Mar. Cuenta con más de 70 stands que reúnen a economías miembros de APEC, instituciones públicas y empresas del sector privado. Los pabellones temáticos de la feria se centran en los tres pilares de APEC: empoderar, incluir y crecer. Dentro de los participantes, se encuentran stands dedicados a negocios que impulsan el desarrollo sostenible en beneficio de las comunidades locales.
Puma Café: Café de calidad con valor agregado
Puma Café es un proyecto que involucra a 10 000 productores de café y cacao de diversas regiones. Busca generar valor en sus productos con un enfoque social y cultural. Andrea Reyes Auqui, barista y catadora de Puma Café, destaca: “Pertenecemos a la organización Central Café y Cacao, una organización que trabaja con productores y cooperativas de muchas regiones como Cusco, Junín, Ayacucho y Puno.” Gracias a este esfuerzo, el proyecto permite a las familias comercializar sus productos en su tienda física en Lima y online.
Aprosem Café y Cacao: Comercio justo y sostenible
Aprosem Café y Cacao es una organización formada por 385 productores de café de regiones como Junín, San Martín, Cajamarca, Huánuco y Lambayeque. Trabajan con diversas comunidades indígenas: en Pangoa, los nomatsiguengas, en Pomahuaca, los quechuas, y en Ferreñafe, los Cañaris. Cuentan con el apoyo del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego. Emer Tauma Espinoza, catador de Aprosem, subraya: “Creemos que el progreso y el desarrollo se logran con la contribución mutua. Tiene que haber un trabajo coordinado entre el Estado y las instituciones privadas.”
Makao Perú: Cacao fino con impacto social
Makao Perú trabaja con cacao orgánico fino de aroma de Lamas, Chazuta y Satipo. Nace como un proyecto alternativo al cultivo de coca. Jenny Mandujano Paredes, encargada de producción, enfatiza: “Lo que hacemos como Makao en la parte social es apoyar a los productores cacaoteros con precios diferenciados (…) capacitamos a algunos productores en lo que es post cosecha, para mejorar la calidad del cacao.” La calidad de sus productos les ha permitido entrar al mercado japonés.