AFIRMA ALEARDO FERRANDO RUIZ, LÍDER HISTÓRICO DE LAS LUCHAS POPULARES EN SAN MARTÍN.
“Las víctimas mortales por la Covid-19 en el país especialmente en San Martìn es debido a la falta de previsión, la indolencia y, sobre todo, insisto, a la corrupción generalizada que corroe las bases de nuestra nación”, así de enérgico y consternado expresó el maestro Aleardo Ferrando Ruìz, líder histórico de las luchas reivindicativas del magisterio y del pueblo de Marisdcal Cáceres, tras enterarse de la muerte del exalcalde de Juanjuì Wilson Pérez Iglesias a quien consideró “su entrañable amigo y compañero de jornadas de luchas sociales”
“Un momento muy triste y duro. Un amigo de toda la vida dejó de existir”, evocó tras fustigar que la corrupción “es el otro virus que camina junto a la pandemia, camuflada, consumiendo la vida de centenas y miles de personas. Traficantes perversos, funcionarios corruptos que especulan con las medicinas, el oxígeno, los bonos orientados a aliviar la pobreza, las bolsas de alimentos, los instrumentos de bioseguridad médica, etc.”
El reconocido dirigente social Aleardo Ferrando Ruìz reseñó que, por más de 25 años el Estado fue saqueado sistemáticamente por organizaciones criminales enquistados en el cogollo del poder político, cinco ex presidentes envueltos en corrupción, uno de ellos auto eliminado, otro en proceso de extradición y los otros con orden de impedimento de salida del país son sin lugar a dudas, la imagen de un país avasallado por la corrupción que, a mayo del 2017 según la Defensoría del Pueblo, cuesta a los peruanos más de 12,000 millones de soles por año, dinero con el que podríamos haber equipado hospitales, construir otros nuevos que nos hubieran permitido combatir el COVID-19 en mejores condiciones y con el menor costo en vidas humanas.
“Wilson Pérez Iglesias y los miles de muertos a nivel nacional, son víctimas de este andamiaje burocrático y corrupto. Por ello, el mejor homenaje que podemos hacer es que esto pare, poniendo en pie nuestras organizaciones y planificar la lucha no sólo contra las personas que administran el poder, también contra el sistema político económico neoliberal, en cuyo marco se exhiben profundas desigualdades e injusticias, que hoy estamos pagando con un elevadísimo costo social”, emplazó Ferrando Ruìz a la sociedad civil sanmartinense.
Al respecto dijo, que Wilson no fue ajeno a esta lucha. “En nuestras conversaciones telefónicas siempre fue un tema recurrente y casi siempre terminábamos con la pregunta ¿Qué hacer? Y ahora, si nos hacemos colectivamente la misma pregunta, seguro que concluiríamos colectivamente en la misma respuesta: Organizarnos y luchar, porque sólo, con los que se yerguen por sobre las vicisitudes y contra el poder mediático, podremos iniciar los cambios de fondo que Juanjui, San Martín y el país necesitan con urgencia”
“Este es un momento muy difícil, porque con Wilson se va parte de nuestra historia, parte de nuestra generación que por los años 60, 70 estuvo integrada por jóvenes maestros que nos autodenominamos “La Generación del 70” del que Wilson fue uno de los principales actores junto con Teócrito Pinedo, Moisés Vásquez, Alberto Ruiz, Lindenbert del Aguila y otros que ya no están. Nos unía no sólo la juventud, el ser coetáneos, el haber nacido en la misma tierra sino, además, las ganas de hacer algo trascendente, de romper la monotonía en un Juanjui que no rompía aún su carácter rural. Así es como empezamos a tener una vida más activa en el ámbito de lo gremial, cultural. Los acontecimientos políticos que se desarrollaron en el continente por aquellos tiempos: la Revolución Cubana, La Nicaraguense, el Mayo Francés y más tarde la irrupción del Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas que reivindicaba un tipo de socialismo, fueron estímulos para dar los primeros pasos en la actividad política, en el desaparecido Partido Socialista de los Trabajadores(PST) del que Wilson fue uno de sus dirigentes y como tal, participamos en una polémica con el líder histórico del partido aprista Armando Villanueva del Campo en las elecciones del 80, en la Plaza de Armas de Juanjui, no teníamos nada que perder pero sí mucho que ganar, como así fue.
Aleardo Ferrando recuerda que Wilson Pérez Iglesias fue un activo constructor de la unidad del magisterio en torno al SUTE del que también fue dirigente. Impulsor y constructor del FEDIP organización popular que dirigió la histórica huelga campesina de los 70’ que tras la toma de un avión de Aeroperú, en el aeropuerto de Juanjui, arrancó reivindicaciones importantes para los campesinos y el pueblo.
“Fundamos el Círculo Cultural “José María Arguedas” cuyo principal objetivo era editar la revista “Despertar” con una orientación crítica, que pretendía motivar a la gente, construir conciencia ciudadana y superar la apatía e indiferencia de nuestros conciudadanos. Por acuerdo unánime de los miembros del club, nombramos a Wilson como su director permanente, por su pluma ágil, inteligente y perspicaz. Lamentablemente “Despertar” no pudo seguir saliendo por las limitaciones económicas y las dificultades materiales.
Por los años 80’ vino la diáspora, el club se diluyó y cada quien se dedicó a su proyecto personal. Wilson continuó en la escena pública haciendo periodismo. Como Director Regional del Instituto Nacional de Cultura y como alcalde del Consejo Provincial de Mariscal Cáceres, asumió la defensa de nuestro patrimonio cultural. Revalorar el Gran Pajaten fue uno de sus objetivos. La expedición organizada por él hacia el área arqueológica tuvo esa motivación, pero, además, posesionarnos como herederos de los restos históricos que podrían explicar el origen de nuestros pueblos.
“Bien que el alcalde Víctor Raúl López haya comprometido al presidente Vizcarra en este proyecto, pero hay que actuar tan pronto pase la pandemia. Será una forma de reivindicar el legado de Wilson Pérez Iglesias. Wilson nos dejó. La cultura y el periodismo pierden a uno de su más claro exponente. Juanjui pierde a un ilustre ciudadano. Los jóvenes pierden a un referente académico y fuente de información. Y Yo pierdo a un amigo entrañable de toda la vida. Hasta siempre compañero. Para los que aún quedan en pie, cuídense, no tomen riesgos innecesarios. Protección total para médicos, enfermeras y trabajadores que están en la primera línea”, finaliza Aleardo Ferrando Ruiz.