En medio de estos caóticos días que vive la humanidad en las manifestaciones más densas, es importante y recomendable elevar nuestro espíritu para acceder elevándonos a la contemplación de la contraparte sutil pues, como sucede con el árbol, mientras más descienden las raíces, más alto se eleva el tallo y las ramas. Depende de nosotros el lado mental que elijamos atender, para ascender o descender en esa alquimia espiritual.
En ese sentido, en el plano de la más alta manifestación de la espiritualidad propia de esta Era, se recuerda el 15 de diciembre, un aniversario más de un acontecimiento de suprema importancia para la preservación de la vida misma de toda la humanidad: la inauguración y entrega, en 1958, del Discipulado Modelo de la Jñana para la Bakti al Maestre, creado por el Maestre Dr. Serge Raynaud de la Ferrière, Iluminador y Avatar de esta Era, encargándoselo a su Discípulo Predilecto, el Maestre Dr. David Juan Ferriz Olivares, Apóstol del Saber. Así lo declara este último:
“El 15 de diciembre de 1958 el Maestre Dr. Serge Raynaud de la Ferrière inauguraba el discipulado Modelo del Saber de la Nueva Era en carta que me dirigió inicialmente en medio de 600 cartas que me envió durante siete años (1956-1962): “Yo lo veo como elemento tipo para la divulgación de los principios de la Fundación del doctor de la Ferrière; sería usted la persona impregnada del Discipulado Modelo que podría orientar más en esta línea de la “Jñàna” para la “Bhakti” al Maestre”.
“El Discipulado Modelo de la Jñàna para la Bhakti al Maestre es el Discipulado que realiza el nivel conciencial y existencial del hombre a través del Saber, que es la penetración del conocimiento y de la intuición para desde ahí y sin abandonar el Saber ni los Bhumis [Estados de Existencia], ni los Dhatus [Elementos], ni los Nagasiddhis [Facultades], realizar la Parabhakti (Paradevoción) antes explicada. Se deberá comprender este Discipulado Modelo como una realidad que enfoque una interrelación no solo hacia dentro de sí o hacia lo interior, sino también al mundo, dándole no solo la experiencia y la vivencia de cada uno sino también la existencia, realizando internamente la profundización de las enseñanzas e ir más allá de la creatividad.”
“A través de los tiempos la historia del Discipulado y de la Vía del Saber está matizada de un sentido de lo heroico, de un sacrificio y de un apostolado que en muchas ocasiones ha sido objeto de las mayores afrentas y persecuciones.
“El Discipulado establecido, protegido y bendecido por el Maestre, de la Jnana para la Bakti al Maestre, debe avanzar y perdurar, por varias eras, a pesar de todos los obstáculos y contradicciones de estas generaciones de transición entre las dos eras, la de Creer y la de Saber, Piscis y Aquarius.”
“El Discipulado es la base de la transmisión Iniciática, la conservación de la Gran Tradición y la Nueva Forma que ella toma en cada era, sobre todo si se trata de un discipulado que el Maestre Avatar calificó de modelo.”
“El Sublime Maestre no consideró fundar con una nueva denominación el Discipulado Modelo por lo cual no usó el término del yoghismo sino para la base filosófica, puesto que la tradición venía desde etapas upanishádicas a través del término de la Jnana [Saber, Yachay, Conciencia de Vida].”
“En cuanto a los sempiternos ataques y desprecios «iniciáticos» a la intelectualidad por quienes carecen de esa vivencia tan profunda basta indicar el siguiente párrafo: “La pérdida de la intelectualidad priva al ser humano de sus relaciones con lo universal; en ausencia de facultades idealísticas o de dones supra-lndividuales, el hombre no tiene más acceso a la morada del Principio Divino, el dominio de la Gran Causa le está cerrado».